FARMACIA RIBERAS BOTIKA, cercanía y compromiso

Pensó en estudiar enfermería e incluso se ilusionó con lanzarse a la carrera de bellas artes, pero ser farmacéutica terminó siendo su vocación.

En el caso de Susana Gayubas Urresti se puede hablar de aventuras hechas desde el corazón, ya que esta mujer, titular de la Farmacia Riberas en el barrio donostiarra de Riberas de Loiola, se enamoró, nada más verlo, de Artzentales, un pequeño pueblo vizcaíno de 750 habitantes y se lanzó a abrir allí su primera farmacia con tan solo 26 años, lo que dice mucho de su espíritu emprendedor y aventurero.

Artzentales, Balmaseda, Donostia… Su trayectoria profesional está llena de bonitos recuerdos y muchas cosas han cambiado desde entonces, pero hay algo que no ha cambiado en absoluto; la importancia que Susana da al trato cercano y a la empatía con el paciente en la atención farmacéutica.

Hoy, casi 30 años después, Susana lleva una vida mucho más urbana junto a su familia, dirigiendo esta farmacia tan activa en las redes sociales junto con su marido, José Ramón Sanz, y un gran equipo de farmacéuticas y auxiliares. Ha pasado de atender a personas de edad muy avanzada en zonas rurales de difícil acceso a formar parte del día a día con los vecinos de uno de los barrios más jóvenes y dinámicos de San Sebastián, pero en el fondo sigue siendo la misma.

Farmacia Riberas Botika
Barcelona Hiribidea 31, Donostia-San Sebastián
943 46 27 31

Entrevista: Gemma Garbizu
Fotografía: Jon Goda
Coordinación: Laura Manjarrés
Edición y postproducción: Filtro Creativo

De una pequeña farmacia de pueblo en las Encartaciones de Bizkaia a una farmacia con más de 6.000 seguidores en Instagram… Menudo cambio, ¿no Susana?

¡Y tanto! Estoy muy contenta con esta etapa que estamos viviendo desde 2019, cuando decidimos ponernos al frente esta farmacia, pero también guardo un precioso recuerdo de la primera farmacia que abrí por mi cuenta en el año 1994. Artzentales es un precioso pueblo de la comarca de las Encartaciones que tenía apenas 750 habitantes por aquel entonces. Era joven y con muchas ganas de desarrollar mi propio proyecto. Viendo diferentes posibilidades en municipios que carecían de servicio farmacéutico ¡me fascinó esa zona! Es una localidad muy rural, extensa, con no más de cinco caseríos en algunos barrios y con un alto grado de dispersión. Está rodeada de un maravilloso medio natural de pastos y robledales. Me pareció una maravilla de lugar.

Tú eres vizcaína, ¿no Susana?

Así es, yo soy de Durango y mi marido es donostiarra. Comencé trabajando en una farmacia de Bilbao, pero en poco tiempo tuve la inquietud de abrir mi propia farmacia y me lancé a la aventura de empezar desde cero. Tuve que hacer frente a muchas dificultades para conseguir arrancar, con cambios de legislación y superando un proceso de selección, pero finalmente lo conseguí.

¡Menuda aventura! ¿Siempre quisiste ser farmacéutica?

La verdad es que dudé entre diferentes opciones antes de decidirme. Me gustaba mucho pintar y dibujar, me atraía mucho la carrera de bellas artes, pero creo que no era lo suficientemente  creativa y me hubiera muerto de hambre (risas) También me atraía mucho la enfermería, mis padres son enfermeros y siempre me ha fascinado verlos ejercer una profesión con tanta dedicación y entrega, pero finalmente me decanté por estudiar la carrera de farmacia en Pamplona. Me pareció interesante y como quería estudiar fuera de casa me animé.

Me imagino que la farmacia de Artzentales no tenía nada que ver con la farmacia de Riberas…

¡No tienen nada que ver! Mis clientes rurales eran sobre todo personas muy mayores que vivían en un entorno difícil, núcleos aislados, pocos servicios, en condiciones de soledad… Después de cerrar la farmacia solía ir a llevarles los medicamentos a personas que no tenían medios de desplazamiento y entablé una relación muy especial con muchos de ellos. Me invitaban a un café, me contaban sus historias, me regalaban unos huevos… Fue una etapa muy especial, con mucha cercanía humana, dando recomendaciones en el área de veterinaria y agrícola ¡Vamos, que no me aburría para nada!

Y llegaste a tener más establecimientos al mismo tiempo… ¿Cómo te organizabas?

Mi marido, que es biólogo y daba clases en Donostia, comenzó a trabajar conmigo en Artzentales y fuimos formando una familia. A los tres años, decidimos abrir un botiquín farmacéutico en un pueblo cercano que había quedado sin servicio, Turtzios. Nos desplazábamos a ese pueblo para atender el botiquín, y contraté personal para ayudarme a cubrir las necesidades de la farmacia. Fue una época de locos, tenía muchísimas guardias y siempre estaba de un lado para otro, pero soy una persona que me adapto bien a las circunstancias y lo llevé bien.

Y, por si fuera pocos os trasladasteis a Balmaseda.

Así es. Las farmacias rurales comenzaron a ser poco sostenibles y tuvimos la opción de desplazar la farmacia al municipio próximo más grande que era Balmaseda, primera villa de Bizkaia y capital de Las Encartaciones. Todo estaba a expensas de que su crecimiento demográfico lo permitiese ¡No he mirado tanto el censo en mi vida! Tuvieron que pasar diez años para poder mover la farmacia a esa localidad y mantener el servicio de los botiquines en los pueblos.  Fue una etapa muy intensa laboralmente, aunque curiosamente pude empezar a tener una vida más tranquila al tener menos guardias y un equipo más extenso.

¿Cómo surge la idea de veniros a San Sebastián?

Fue idea inicial de mi marido, pero no te creas que me convenció fácilmente; ¡tardó un año en que accediera! (risas). Nos planteamos el reto de desplazarnos a un entorno urbano más ilusionante y dinámico a la hora de desarrollar proyectos desde la oficina de farmacia. Aunque inicialmente nos costó dar el paso te diré que estoy muy contenta de la decisión tomada. Valoramos diferentes localizaciones en Euskadi, pero en cuanto surgió la oportunidad de adquirir la farmacia de Riberas por la jubilación de los anteriores propietarios nos costó poco decidirnos. Mi marido es de aquí, conocíamos bien la ciudad y siempre me ha gustado mucho, así que nos decantamos por Donostia. Además, casualidades de la vida, yo ya conocía la farmacia desde unos años antes porque mi cuñada era clienta, y me encantaba la zona. Hablamos con nuestros hijos, que ya eran mayores, y entre todos decidimos  lanzarnos a esta nueva aventura.

El cambio debió ser enorme…

Fue un gran cambio en lo personal y en lo laboral. Pero tuvimos la suerte de contar con el personal que ya estaba en la farmacia y resultó ser un equipo de profesionales magnífico con el que hemos encajado muy bien; tenemos muy buen ambiente de trabajo y eso para mí es fundamental, tenemos mucho que agradecerles a ellas.

Al poco de adquirir la farmacia llegó la pandemia… ¿Cómo lo viviste?

La verdad es que no tengo un mal recuerdo, soy una persona tenaz y emprendedora y afrontamos las adversidades de la manera más positiva. Mi marido, que es muy manitas, enseguida instaló unas mamparas de protección y nos turnamos en grupos para evitar que los contagios nos impidiesen trabajar. Tuvimos la suerte de que nadie del personal se contagió. En todo momento intentamos mantener la calidad y la cercanía humana en la atención pese a los difíciles momentos que estaban pasando muchas personas. Pese a las dificultades fue muy emocionante también, recibir el cariño y agradecimiento de la gente del barrio.

Por lo que has dejado traslucir en esta entrevista lo que más te gusta es el contacto con la gente…

¡Sin duda! Me encanta poder aconsejar y ayudar, y aunque soy algo tímida, me gusta mucho estar en contacto con las personas. En esta profesión debemos ser muy empáticos. A diario atendemos a personas que pasan por muy diferentes situaciones personales y necesitan ser escuchadas, comprendidas y aconsejadas para mejorar su salud y la de sus familias. El trato humano es algo esencial en nuestra farmacia. Nosotras no solo vendemos productos, atendemos a las personas.

Cada vez se da más tendencia hacia el consumo de productos naturales en todos los ámbitos ¿Lo notáis mucho en vuestra farmacia?

Sin duda. La sociedad es cada vez más consciente de que el acercamiento a un consumo responsable y la adaptación a una vida más saludable redundan enormemente en una mejora de nuestro bienestar. Desde nuestras anteriores etapas apostamos claramente por firmas basadas en salud natural y en la farmacia de Riberas hemos ido incorporando otras firmas buscando siempre la excelencia en el cuidado de la salud de toda la familia.

¿Con qué firmas trabajáis?

Tenemos muchas marcas de inspiración natural que hemos asimilado como fundamentales en nuestro surtido, con una filosofía de sentirte mejor para vivir plenamente. Nos encanta Apivita, una firma cosmética  de origen griego basada en nutrientes derivados de la abeja combinados con plantas mediterráneas. También está Pranarom, empresa belga líder mundial en aromaterapia; el arte de curar gracias a los aceites esenciales de las plantas. Welleda, una marca alemana con el prestigio de ser líder en productos con certificación BIO. Y Darphin, cosmética francesa de alta gama con inspiración natural. 

Para nuestros peques tenemos HIPP (alimentación infantil orgánica). Y debemos mencionar marcas como Sophie la jirafita (juguetes de caucho natural), Mushie (menaje), Frigg (chupetes de diseño y producción nórdica), todas ellas basadas en producción Europea con diseños libres de químicos nocivos, respeto al medio ambiente y a nuestra salud. Son conceptos que consideramos esenciales, es lo que queremos ser. Somos farmacia Apoteca-Natura, especializados en fitoterapia y salud natural de la mano de Apoteca, firma italiana líder mundial en investigación y producción de medicamentos y productos sanitarios basados en plantas. Queremos cuidar la salud para poder hacer un uso moderado y sostenible de los medicamentos. La mejor curación es no enfermar.

En cuanto a los servicios que ofrecéis, ¿cuáles destacarías?

Tenemos una extensa lista de servicios ofrecidos en la farmacia que deseamos mantener y ampliar. Análisis de glucosa, colesterol, triglicéridos… Laboratorio propio para elaboración de fórmulas magistrales. Preparación de pastilleros personalizados con la medicación organizada en blísteres semanales. Servicio de asesoramiento nutricional. También ponemos unos pendientes chulísimos a los bebés y a sus mamás. Y sin olvidar nuestro seguimiento farmacoterápico. En definitiva, todas nuestras chicas están deseando ayudar y aconsejar en todo aquello que pueda mejorar la salud de nuestros clientes.

He visto que tenéis comentarios muy buenos en Internet. Y hablando del mundo online, tenemos que felicitaros por vuestro Instagram, ¡tenéis más de 6.000 seguidores!

Tenemos que agradecer contar con Marta Rodríguez Alvariño, que forma parte del equipo de la farmacia y lleva las redes. Ella lidera al equipo en esa parcela, es una artista y nosotros la seguimos porque aunque a veces pasemos un poco de vergüenza lo hace genial (risas). Nos hemos dado cuenta de que el futuro de la comunicación con la gente pasa también por las nuevas tecnologías además del mostrador.

La verdad es que es de agradecer ver publicaciones desenfadadas en las redes. Y más en estos momentos que siguen siendo complicados.

Seguimos atravesando momentos difíciles en este loco mundo que nos ha tocado vivir, y es muy importante transmitir a las personas un espíritu positivo y vital. En la farmacia de Riberas tenemos un equipo de profesionales extraordinariamente cualificadas. Trabajamos a diario para formarnos y mejorar. Intento liderar un proyecto con un ambiente de trabajo agradable y transmitírselo a todos y a todas los que atraviesan nuestra puerta en busca de consejo. Sin ese equipo sería imposible, y desde aquí quiero dar las gracias a Sonia, Marta, María, Teresa y Andrea.

¿Planes para el futuro?

Seguir trabajando con la misma ilusión para convertirnos en una farmacia de referencia desde este precioso barrio que es Riberas de Loiola, símbolo del crecimiento y la evolución de la Donostia del siglo XXI. Estamos muy agradecidos a nuestras vecinas y vecinos por la confianza que nos demuestran cada día.

Muchísimas gracias, Susana, ha sido un placer conoceros ¡Hasta pronto!

¡Hasta la siguiente publicación! ¡Estad atentos!

¡Nos vemos!

Sin comentarios

Publicar un comentario